¿Navegar solos?
"Ordena mis pasos con tu palabra, y ninguna iniquidad se enseñoree de mí"
Salmos 119:133
Reflexión: A veces sentimos que estamos perdiendo el timón de nuestras vidas, por más que nos esforzamos el volante sigue dando vueltas sin control y no sabemos cómo detenerlo pero por más que nos hallemos en una situación tan desesperante somos incapaces de ceder el control a un verdadero experto.
Salmos 31:3 dice “Porque tú eres mi roca y mi castillo; Por tu nombre me guiarás y me encaminarás”, nuestro Padre es capaz de encaminar el timón de nuestras vidas, es el experto perfecto a quien le podemos confiar todo, porque siempre nos va a guiar por el mejor camino, el que nos dirige al camino de la gracia, porque nuestro Padre nos dirige con amor, respeto, siempre buscando nuestro bienestar.
En ocasiones sabemos que hemos perdido el control de nuestras vidas, pero somos incapaces de confiar en Dios, somos incapaces de ceder el control, preferimos seguir luchando solos tratando desesperadamente de volver a dirigir el timón, y a veces esas luchas son en vano o más tormentosas, a veces por seguir con nuestra necedad tomamos decisiones incorrectas permitiéndole a otras personas, emociones, vicios y problemas agarrar el control de nuestras vidas sin darnos cuenta, y ahí, cuando ya estamos todos aporreados por los golpes que hemos sufrido al perder el timón, es que nos acordamos de Dios.
Lo más triste es que hay personas que ni aún en tales situaciones se dejan ayudar por Cristo Jesús. Soltemos el control de nuestras vidas, dejemos que Jehová lo tome, tengamos un corazón humilde y aceptemos su dirección, pues Él es el experto que va a manejar nuestras vidas por los senderos de luz. Descansemos en Jehová, es la mejor forma de vivir. Dios te Bendiga.
